16 de abril de 2008

Juegos Nocturnos


De como olvidar y no desvalecer en el intento, de como almorzar sin quedar hambriento, de como sobrevivir a uno mismo sin arriesgar el talento, eso y muchas cosas más son las que en esta temporada de sube y baja me han dado de qué pensar. Sigo viendome en reflejos de caos y mutilaciones llenas de espejismos, lo pienso así porque ahora que me siento en el Blog rememoro las andanzas de mi juventud en extasis y la ignoro por completo.


He vuelto con mis pasos a mis razones y radicalidades, dejo de mirar el futuro como juego de poquer y lo asumo mejor como una ruleta, lo observo, lo apuesto, lo critico, lo dejo en vilo, lo dibujo en las noches y de día me pregunto si sigo o no. He regresado con mi novia, ya es la segunda vez que me termina y la segunda que volvemos.

Un ambiente de inconsistencias me rumora lo delicado que es esto del amor, lo dejo replegado en mi piel y cuando vuelvo de noche, lo utilizo como vitamina. Es a decir verdad esa vitamina que me calma la feroz costumbre de caminar, ahora me acomodo con calma, me acomodo a los hechos pero comienzo a festejar un ambiente de incertidumbre y malas costumbres.


He deseado volver el tiempo atrás y apegarme a los vicios de la locura, pero mis sueños me despiertan despejándome de toda duda. Me acomodo en la silla y frente al computador dispongo mis letras, las dibujo con miedo, pero recuerdo en ese instante que es la noche lo que hace que sepamos la existencia de la luna, y no la ciencia.


Seguramente se viene retos propios de mi dignidad, ahora son otros tiempos y otros personajes, son nuevas historias y nuevos romances, me entrego a la curiosidad sin caer el sucio juego de la Vanidad. Julieta comienza a crecer, ya es una gatita adolescente, muy bella ,muy linda, muy de la casa, muy Vargas. Nocturno florece y de poco en poco comienza a cesar la horrible noche. Nuevos retos y nuevas temporadas, nuevas razones para existir, nuevas condiciones para enamorarnos y regalarnos.


Anoche con un exceso de fantasia empecé a pensarme como sujeto indefinido, intentar verme como un niño perdido o un forastero no identificado, en ese orden de mentiras entrevisté mi pensamiento y mi ausencia se tornó en primer plano, se dejó identificar por la malicia que llevo en la derecha, donde cobijo mis guantes con aguas saladas. Con la profundidad del caso, vigilé mi extraña esencia y la caractericé en un juego de roles, me dije mi nombre, me enseñé a correr, me dejé llevar.

En esa faceta de juglares y malabares caminaba sin opinar o sin señalar, me observaba y trataba de conocerme, en definidas facetas vi como mis vicios y mis emociones se fragmentaban en gestos y palabras sacadas de un desorden de cotidianidad. Muchas censuras se cerraron en mi nostalgia, muchas leyes superaron mi desorden, pero mi ingenua presencia se acomodaba a lo escrito, a lo dibujado, a lo imaginado.


Me senté a pensarme, a cuestionarme. A darme cuenta que en cinco años llego a los treinta, que en cinco años pienso tener hijos, que en cinco años debo empezar a acercarme al Ministerio. Me dije lo difícil y esporádico que ha sido el tiempo que he dejado entre sábanas, esa relación fructífera con los apellidos y senos de mi pasado.


En esta osada jungla de paz me retiro a vigilar mi conciente, lo penetro con un silbido felino y dejo en el duelo del hogar los retos de mi nuevo hogar. Finalmente, este gato si sirvió.


AV



2 comentarios:

Anónimo dijo...
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
Absurda dijo...

Excelente escrito que ojalá hubiese salido de mi cabeza...si, imposible por la diferencia de las dimensiones, de los mundos. Todo esto para decir que tal vez me lo robe para mi y lo ponga en algun luar de la memoria.