21 de septiembre de 2007

24 Momentos Más Recordados en mi Vida

Cuando el tiempo nos acecha en la memoria, nos remite a pensar en acusaciones y favores, en escenarios y ocasiones, en agradables y no tan agradables sucesos que basados en la percepción dejamos archivados en la memoria, en el inconsciente que nos guía por los buenos rumbos de los sentimientos, momentos que nos dan felicidad, asombro, tristeza, que nos gestan sentimientos puros como el amor, el odio.

Momentos que forjan amistades, que dejan huella o que simplemente suelen ocurrir para darnos una lección de vida, algunos de esos momentos son fruto del esfuerzo, otros son casualidades de la cotidianidad, otros simplemente ocurren por gracia o desgracia de esos caminos que llamamos madurez.

Estos 24 momentos son los que más recuerdo de estos 24 octubres de vida, es muy injusto el siguiente top 24 debido a que muchos quedan por fuera de la lista, quizás, por vacíos en la memoria o porque no hay manera de ubicarlos dentro de letras y expresiones llenas de esfuerzo.


1. Cuando me sacaron las cordales. Dejando a un lado la evidente fobia que tengo hacia las jeringas, el consultorio del profesional de la salud que prestaba sus servicio tenía espejos en el techo, para mí ello fue una tortura que duró tres horas, donde recostado en la silla miraba el reflejo de aquellas jeringas que me anestesiaban la boca y aquellas herramientas tediosas con las que me sacaban mis muelas del juicio, fue un suceso de nunca olvidar.
2. Cuando me vomité en la Cama de mi mejor amigo. Después de una botella de tequila, acompañado por la nostalgia y la depresiva energía nocturna, el licor hizo de las suyas en ese espantoso momento de soledad, embriagado hasta la sombra, fui llevado a la casa de Alejandro para que mejorara la borrachera, él muy atento me acomodó en su lecho, sin embargo y con la ingratitud del alcohol devolví atenciones sobre su colchón, sus sábanas, su almohada y su amabilidad, sé que él tampoco olvidará ese momento tan amargo donde vomité hasta el primer tetero.
3. Cuando me expulsaron de Tropical Cocktail´s en Atlantis Plaza (Bogotá). Acababa de conocer a Angélica Alsina, quien tiempo después fue mi novia en mi primer año en Bogotá, esa noche fuimos a la zona rosa de la capital y nos sentamos a conversar y beber en la barra del establecimiento de moda, con toda la pasión comenzamos a besarnos y a sobrepasarnos en las caricias, el mesero después de un largo tiempo de pasión nos entregó la cuenta y nos solicito que nos retiráramos debido a que estábamos haciendo espectáculo en zona pública, el guarda de seguridad nos acompañó hasta la salida del centro comercial, esa noche la pasión siguió en mi casa.
4. Mi Primera Relación Sexual. Quienes de verdad me conocen, saben que uno de mis fetiches son las mujeres de cabello rojo, pues bien para cualquier hombre y más aun para cualquier adolescente, la primera relación sexual es algo de nunca olvidar. Para mi caso es algo más que especial debido a varias razones, la inicial que la dama era de cabello rojo, segundo porque era mucho mayor que yo (me llevaba doce años de distancia) y la más rememorada de todas las razones porque yo en ese entonces solo llevaba trece años de vida.
5. Mi Primera Noche en Buenos Aires. No solamente el hecho de conocer un país y una ciudad turísticamente llamativa era la razón por la cual este momento de mi vida hace parte de la lista 24, sino porque esa misma noche, dos horas después de haber llegado al hotel y dejado maletas conocí a Marianne, una judía de ojos claros procedente de Tel Aviv que no habla el español, de 28 años de edad y con un cuerpo de desear, pues bien, esa noche después de la cena de 24 de diciembre nos unimos en las sábanas de su habitación de hotel sin darle importancia al exilio del idioma. Uno de los mejores polvos quizás que están en mi memoria, que manera de empezar unas vacaciones en Buenos Aires.
6. NOCTURNO 2003: TOMA LA PALABRA. Nocturno es un hijo que he dado a luz con lágrimas y sangre, un proyecto que nació de muchos sueños colectivos y terminó en una realidad colectiva. La noche del 20 de agosto de 2003 quedará para siempre en mi memoria como la noche en que nació el primer nocturno.
7. 13 agosto 1999. Ese día para mis casi 15 años edad, mi rutina de desayunar con afán para salir a tomar la ruta de bus que me llevaría al colegio fue interrumpida por un suceso que seguramente marcó la vida de algunos colombianos, el Humorista Jaime Garzón fue asesinado en su camioneta tiempo después de salir de R@dio Net de una entrevista. Ese día no pude prestar atención a ninguna de las clases, inclusive hoy día me sigo lamentando por su asesinato.
8. Cuando cumplí mi mayoría de edad. Cumplir los 18 años es un acontecimiento que hay que celebrarlo hasta caer en las garras del alcohol, ese día mi celebración se limitó a hacerle compañía a una pareja de enamorados, yo tocando el violín celebré mi cumpleaños con la decepción en la mano.
9. Todas las Navidades con mi Abuela Alicia. Mi abuela materna es la persona que más AMO en este mundo, por eso cada una de las navidades que pasé con ella son inolvidables, su sola compañía me alegra la existencia, el único detalle negativo es que ella vive en EE.UU y por ello no la puedo ver todos los años sino, muy esporádicamente.
10. Cuando Casi se arma un tiroteo en una buseta bajando de Pance. Ese domingo, después de hacer una jornada de integración y reflexión con el equipo de Nocturno, siendo las 5 Pm bajé a Cali en una Buseta recreativos llena hasta el techo, de repente un par de borrachos comenzaron a discutir, cada uno con una arma en la mano se apuntaba de manera amenazante, desgraciadamente yo estaba en medio de los dos agresores y sin nada que hacer. La situación no pasó a mayores, pero vi mi vida en un instante.
11. Mi Primera vez en el Atanasio Girardot. Era la primera vez que viajaba a Medellín y para esa ocasión mi equipo del alma, el Club Atlético Nacional de Medellín, jugaba de local frente al Deportes Quindío. Un buen amigo paisa me llevó al estadio a la localidad de Sur para ver el partido, con la barra de Los Del Sur LDS gritamos y vivimos ese partido, al final del día me regalaron mi primera camiseta del Atlético Nacional.
12. Mi Viaje a Disney. Cuando niño mis padres en compañía de mis abuelos maternos me llevaron a Disney World, un acontecimiento que quedó en mi memoria más como sensación positiva que el mismo hecho de recordar detalladamente el viaje. Fue una gran navidad.
13. Los Congresos de Comunicación Social. Todos los congresos de comunicación en los que participé fueron ocasiones para conocer gente, aprender de la vida y derrochar momentos excitantes, imposible olvidarlos.
14. Cuando gané las elecciones al concejo de la Facultad en la Javeriana. Ganar un cargo por elección popular es algo que queda en el recuerdo, más aun cuando se trata de la representación de mas de mil estudiantes en una universidad como la Javeriana, lo grato de este recuerdo es que gané con la votación más alta en la historia de la universidad, todo un momento para alardear.
15. Cuando Fui a la Iglesia Cristiana. Uno de los que se decía ser mi mejor amigo en la época de bachiller me invitó con su novia a la iglesia cristiana, yo desconociendo lo que sucedía me deje influenciar por un tiempo de esa comunidad, cuando descubrí que fui engañado forjé mi odio a esa religión y sus creyentes, hoy en día no los tolero, pero ya no los odio. Ese joven dejó de ser mi amigo desde ese incidente.
16. Cuando gané el concurso nacional de cuento del periódico El Tiempo. Después de ganar cuanto concurso interno de cuento se hacía en el colegio y de estar en los primeros lugares en uno que otro intercolegiado, en el año 2000 el periódico EL Tiempo me otorgó el premio nacional de cuento joven, fue muy gratificante esa distinción, fui entrevistado y salí en el diario con un fragmento del cuento ganador en la circulación nacional, mi familia se dio cuenta en toda Bogotá. Hoy sigo escribiendo pero hace muchos años no participo de alguna convocatoria literaria.
17. El Velorio de mi Abuela Paterna. En mis vacaciones en Girardot, aquellas vacaciones de junio, mi abuela Olga se enfermó y yo era el único que estaba en la casa con ella, el resto de la familia había salido de compras, llamé a urgencias y la llevaron al hospital del pueblo, a los dos meses ella murió. En su velorio lloré como nunca por alguna extraña razón, quizás no había asimilado su muerte aun; después de su entierro y el duelo, hoy, doce años más tarde recuerdo cada detalle y cada instante de ese suceso. Un dolor profundo.
18. Concierto de Conciertos Bogotá 2001. Fue al primer concierto que asistí en Bogotá, fue en el estadio El Campin, ubicado en Gramilla y viendo al escenario desde las 5 pm vacío y grande (un estadio muy bello) se dio la espera a que empezara el espectáculo, uno de los mejores conciertos a los que he ido.
19. Mi Apartamento en Bogotá. Este recuerdo no es basado en el hecho de experimentar lo que significa vivir solo y de manera independiente, este suceso queda en mi memoria debido a que durante mi estadía en ese apartamento experimenté toda clase de sustos y miedos, el recinto contaba con la presencia de una presencia sobrenatural, me asustaban y me movían las cosas, todas las noches tenía pesadillas y ocurrían cosas inexplicables. Gracias a ese incidente aprendí a manejar los temas sobrenaturales y comprender algunas cosas que en el plano terrenal no son entendibles.
20. Cuando Conocí la casa de Julio Cortázar. En la provincia de Buenos Aires me alejé del grupo del tour en búsqueda de unos cigarrillos, allí, en una calle alejada del sector turístico de El Tigre, en las cercanías de San Isidro encontré la casa museo de Julio Cortázar, nadie más estuvo allí. A julio!
21. Uno de los recuerdos que no puede faltar: Cuando Natalia París me firmó su calendario y posó conmigo para una foto, hoy en día sigo recordando ese día con la misma emoción con que le di un beso en la mejilla y vi su hermoso cuerpo a menos de un metro de distancia, tenía un escote hermoso, amo a Natalia.
22. Superando la barrera del dolor, dejando a un lado mi fobia y dejándome influenciar por agentes externos me coloqué un piercing en la ceja derecha, se me veía bien. Lo que nunca olvidaré es la gigantesca aguja con que me perforaron la ceja.
23. Cuando dicté una conferencia en la feria Internacional del Libro de Bogotá. Frente a un auditorio de 300 personas presenté mi ponencia sobre literatura y gestión de espacios juveniles, fue una conferencia que después de dictarla me di cuenta representaba un hecho importante en el programa de la feria del libro, pues era la primera vez que un joven dirigía un espacio académico.
24. Finalmente, para nunca olvidar: Mi primera noche en una estación de policía. Sin comentarios al respecto, simplemente queda para mi memoria ese incidente donde el humor y la recocha pesada fueron la vitamina que nos alegró la noche a quienes estábamos en ese entonces encarcelados. Para reírse.


Espero con esto sepan un poco de mi vida, esperen la siguiente lista sobre las 24 personas más influyentes en mi vida. Hasta entonces.
AV.

6 comentarios:

Andrés Eduardo Chicué Romanoff dijo...

Te entiendo cuando hablas en el punto 4 de tu fetiche... hay personas y colores de pelo que nunca se olvidan!... en mi caso es el pelo rubio...

Interesante conteo, cuenta más cosas!

Anónimo dijo...

Como decía: me encantan este tipo de posts. Olímpica la saca de Atlantis ... pero es que uno en esa situación no "se mide". Lo entiendo porque he pasado por lo mismo, aunque no me han sacado de ninguna parte, por suerte.
También estuve en ese concierto, aunque unos pocos minutos. Es curioso como he pasado por situaciones similares, como la 14 (aunque eran 5.000 ;), y las pelirrojas. Pero "de fábrica", irlandesas.

Absurda dijo...

jeringas, velas y estadios. Sangre, dolor y pelirojas...

Se lo digo aquí de nuevo, para que perdure en el tiempo: me gusta su mente.

Anónimo dijo...

Ya estás muy grande para estar invetando cosas sobre tu historial sexual, no crees, es hora de crecer. Porque ademàs de besitos entre nosotros nada, así que por respeto a tus 'recuerdos' y a las leyes de nuestro paìs exijo que mi nombre no este ahí en las próximas 24 horas. Antes de hablar de los demás creo que tienes que tener permiso especialmente si esta en juego su buen nombre y por mentiras.

Ya sabes quién es.

Anónimo dijo...

Que hubo Armando tanto tiempo sin saber de usted, que bueno que esta bien y con es entusiasmo para escribir, estaba leyendo lo de sus 24 mejores momentos y me di cuenta que como siempre no tuvo la valentía de incluirme dentro de ellos, es que ya no se acuerda ese día que tomamos hasta el amanecer y luego nos fuimos a su casa a seguirla pero al final terminamos en ese enredo de sabanas y pasión en donde me declaro todo lo que sentía por mi y lo tanque que le gustaba, la verdad Armando es una lastima porque yo aun pienso en esa noche de amor con usted.

Pablo Martinez.

Anónimo dijo...

Armando, por segunda vez exijo que inmediatamente retires tus comentarios sobre mi persona de tu Blog, puesto que estàs injuriando mi nombre y no tienes mi permiso de publicar falsedades de las fantasías que se dieron en tu cabeza, por lo cual te aconsejo buscar ayuda siquiatrica y psicologica para ese problema de percepción que tienes.

Este un ultimatum para no comenzar un proceso legal contra voz. Y recuerda que es tu palabra contra la mia y por calumnia puedes pasar unas buenas vacaciones modelando, no agrandes más el problema de lo ya está.

att,

Angélica Alsina Varela