28 de abril de 2008

Desde la Ventana


Derechos de Autor - La Imagen ha sido tomada de: MONART DRAWING SCHOOL May 5 - June 30 Youth Gallery
Desde la ventana es que se siente ese aire extraño que nos da la señal de ese algo que ha regresado para quedarse, ese algo que en nuestro diario vivir no es más que una simple y pasajera sensación de querer vivir de largo, señales que se nos enmudecen en el seco de los labios, en esa saliva que no tragamos ni que tampoco expulsamos.

Desde nuestra no mencionada condición de anónimo es que nos sumergimos en los nervios y jugamos a serle infiel a la vida, donde no preguntamos el nombre ni ofrendamos a los sabios para saber que lo que pensamos se aleja de toda realidad, se sumerge en notas suicidas que no nos ofrecen si quiera un segundo de paz interior. Donde deseamos comernos en un suave ejercicio de sadomasoquismo, donde nos aferramos a la esperanza y con una letra doble nos orientamos a una lectura de hechos insignificantes y vagos, perdemos para poder jugar a ser victimas y bajo esa condición poder entregarnos a la imaginación.

Desde la ventana suspiramos ese vacío que llamamos calle, ese lugar que habitamos desde la distancia, donde nos encontramos en miradas, donde nos encerramos en el marco de la casa, esa esquina que reflejamos y rezamos para que se quiebre en un canto melodramático.

Como un inválido anhelamos salir, caminar, recoger los pasos o simplemente sentarnos en otra ventana para hablar de más, dejar salir esa verborrea que nos identifica como jóvenes. Nos igualamos con la costumbre de adivinar el nombre de esos sujetos que caminan con afán, nos amarramos al pensamiento y lo dejamos salir como un gas que no aguantamos en la intimidad. Cocinamos recuerdos y los sasonamos con elegancia, le damos ese giro oculto que la misma casa tiene cuando no la habitamos, cuando no le pertenecemos.

Seguiremos siendo observadores que quieren ser observados.
AV

21 de abril de 2008

A Lo Natural


Quiero rendir un homenaje a la tierra con este post, sí, según el Discovery Chanel y NatGeo esta semana es la semana verde, o semana de la tierra. Semana en la que estas dos redes de televisión transmiten especiales y documentales alusivos no solo a la caracterización y origen del planeta sino además sobre especiales de destrucción masiva y proyección futurista (apocalíptica) de las condiciones ambientales de la raza humana y su entorno, todo en un solo escenario de motivación y complot para mejorar las condiciones del calentamiento Global, la caza indiscriminada de especies salvajes, la gran mayoría de ellas en vía de extinción, el mal uso de la basura y el mal ordenamiento de las ciudades y territorios ocasionando variaciones en los mares, ríos y lagos.

Esa contaminación auditiva y visual que nos inunda en las calles, que nos somete a cambios fuertes en la identidad, esa contaminación que se convierte en modo de vida en los callejones sin salida que nos inventamos en el pasar de la rutina, basura emocional, basura espiritual, basura medieval al fin y al cabo. Avanzamos al ritmo del tercer mundo, nos enajenamos con las curiosidades de los países desarrollados e inclusive nos entregamos a los vicios de las calles, ese caminar pausado y temeroso que nos promete en tiempos electorales esa consigna que dicen es "la cultura ciudadana". Esa premisa que repudiamos en la casa y en la escuela, que nos la metieron por los ojos en los noventa y que hoy en pleno decenio nuevo llamamos reciclaje, pero es que si vamos a reciclar debemos por empezar a reciclar esos malos sentimientos y odios guardados que en reciclar papeles, cartón y botellas.

Hay ciertos empaques o bolsas plásticas que según el color nos indican donde se deben botar los desperdicios que diariamente mal implementamos, así y todo, confundimos el cartón y el icopor con el color del basurero donde debemos de arrojarlo para poder reciclar, finalmente en este asunto voluntad hay y mucha, pero educación y conciencia poca, es decir, decidimos reciclar y ahorrar agua cada vez que una campaña de prevención o imposición política nos lo exige, pero en estos laboratorios sociales se nos olvida colocar alguna bolsa plástica que de determinado color nos enseñe a reciclar esa intolerancia y ese rencor que llevamos en los bolsillos, o por lo menos innovar con algún artilugio que al igual que en los automotores, nos regule el CO2 que sacamos de nuestro cuerpo, para el caso de nosotros los mortales, el CO2 (Conciencia Doblemente Oxidada) se repliega como virus por los espacios del hogar hasta inunda escuelas, parques y lo más absurdo de todo, los semáforos.

Reciclemos la pobreza, Reciclemos el hambre, reciclemos todos los esfuerzos para sembrar amapola o promover espectáculos humanos en circos legislativos, tratemos que nuestra conciencia se disperse un tiempo y como gota de agua ayude a nacer un río de tolerancia y respeto, un mínimo de amor y sentido de pertenencia, para que los tratados internacionales promovidos por la ONU y UNESCO se dediquen a rifar anchetas y no a mendigar protestas.

Al fin y al cabo todo este mundo color rosa o este imaginario de la Paz Perpetua que promovemos en Blogs, Murales, Graffitis, Caricaturas, Literatura y Academias sociales no se quede como un cliché o un espasmo de pasión secular, sino que se determine como el modelo de Statu Quo que se debe dictar en las escuelas básicas primaria y fortalecer en los escenarios de la educación media y superior, ahora bien, todo nace como un modelo de consumo y producido, un modo de vida y no como un reglamento o un fisco normativo. Quisiera en estos momentos que esta semana de la tierra tuviese el protagonismo que merece y no ese anónimo rol de documental que asume en la programación de las dos principales redes mundiales de TV.

Absurdamente me siento a escribir este post como tributo a GAIA, como un breve homenaje a esta semana verde que se promueve en algunos canales de tv, lastimosamente se y estoy convencido que las necesidades ante este tema se rezan en otro tipo de movimientismos y no estos espacios de reproducción intelectual, es decir, donde logramos es escribir cosas que ya sabemos pero no movilizar a los lerdos que ya conocemos. Espero lograr algo con este sencillo escrito, si quiera una crítica negativa, pero moverle el traste a algún desprevenido.

Suerte y que sigan su rumbo.

AV

16 de abril de 2008

Juegos Nocturnos


De como olvidar y no desvalecer en el intento, de como almorzar sin quedar hambriento, de como sobrevivir a uno mismo sin arriesgar el talento, eso y muchas cosas más son las que en esta temporada de sube y baja me han dado de qué pensar. Sigo viendome en reflejos de caos y mutilaciones llenas de espejismos, lo pienso así porque ahora que me siento en el Blog rememoro las andanzas de mi juventud en extasis y la ignoro por completo.


He vuelto con mis pasos a mis razones y radicalidades, dejo de mirar el futuro como juego de poquer y lo asumo mejor como una ruleta, lo observo, lo apuesto, lo critico, lo dejo en vilo, lo dibujo en las noches y de día me pregunto si sigo o no. He regresado con mi novia, ya es la segunda vez que me termina y la segunda que volvemos.

Un ambiente de inconsistencias me rumora lo delicado que es esto del amor, lo dejo replegado en mi piel y cuando vuelvo de noche, lo utilizo como vitamina. Es a decir verdad esa vitamina que me calma la feroz costumbre de caminar, ahora me acomodo con calma, me acomodo a los hechos pero comienzo a festejar un ambiente de incertidumbre y malas costumbres.


He deseado volver el tiempo atrás y apegarme a los vicios de la locura, pero mis sueños me despiertan despejándome de toda duda. Me acomodo en la silla y frente al computador dispongo mis letras, las dibujo con miedo, pero recuerdo en ese instante que es la noche lo que hace que sepamos la existencia de la luna, y no la ciencia.


Seguramente se viene retos propios de mi dignidad, ahora son otros tiempos y otros personajes, son nuevas historias y nuevos romances, me entrego a la curiosidad sin caer el sucio juego de la Vanidad. Julieta comienza a crecer, ya es una gatita adolescente, muy bella ,muy linda, muy de la casa, muy Vargas. Nocturno florece y de poco en poco comienza a cesar la horrible noche. Nuevos retos y nuevas temporadas, nuevas razones para existir, nuevas condiciones para enamorarnos y regalarnos.


Anoche con un exceso de fantasia empecé a pensarme como sujeto indefinido, intentar verme como un niño perdido o un forastero no identificado, en ese orden de mentiras entrevisté mi pensamiento y mi ausencia se tornó en primer plano, se dejó identificar por la malicia que llevo en la derecha, donde cobijo mis guantes con aguas saladas. Con la profundidad del caso, vigilé mi extraña esencia y la caractericé en un juego de roles, me dije mi nombre, me enseñé a correr, me dejé llevar.

En esa faceta de juglares y malabares caminaba sin opinar o sin señalar, me observaba y trataba de conocerme, en definidas facetas vi como mis vicios y mis emociones se fragmentaban en gestos y palabras sacadas de un desorden de cotidianidad. Muchas censuras se cerraron en mi nostalgia, muchas leyes superaron mi desorden, pero mi ingenua presencia se acomodaba a lo escrito, a lo dibujado, a lo imaginado.


Me senté a pensarme, a cuestionarme. A darme cuenta que en cinco años llego a los treinta, que en cinco años pienso tener hijos, que en cinco años debo empezar a acercarme al Ministerio. Me dije lo difícil y esporádico que ha sido el tiempo que he dejado entre sábanas, esa relación fructífera con los apellidos y senos de mi pasado.


En esta osada jungla de paz me retiro a vigilar mi conciente, lo penetro con un silbido felino y dejo en el duelo del hogar los retos de mi nuevo hogar. Finalmente, este gato si sirvió.


AV



8 de abril de 2008

Gato de Abril


No me reportaba desde tiempo atrás sin razón alguna, de hecho me había distanciado severamente del ejercicio del escribir, me dedico nuevamente a otra de mis pasiones, a la producción cultural, y es que es en este mes de abril que las cosas se me están dando nuevamente en la arena laboral, con tropiezos y amagues lentos pero fijos, resultados creíbles e inclusive admirables. No me dejaba sentir en este blog porque quizás consideré ese espacio virtual como un agente muerto de cambio, un espacio de muerte y cenizas, una página virtual de emociones que se hecha de menos, de fotos y artilugios propios de la memoria; me resbalaba en la ingratitud, dejaba a un lado mi ejercicio del escribir por dedicarme al de la producción cultural, equilibrio al fin y al cabo.

Es duro darnos cuenta que las razones que nos obligan a escribir son en la mayoría de los casos razones negativas y llenas de dolor, algunas más venenosas o lujuriosas que otras. Me prometí escribir un post sobre el Gaticidio que se está desarrollando en mi pueblo natal, me prometí escribir un post sobre el cambio de generación en mi entorno, me prometí protestar sobre malos manejos y entendidos que se datan en mi tierra, inclusive alguna vez mencioné escribir algo sobre el libro maldito aquel, lastimosamente pudo más el silencio y la indiferencia que el qué hacer literario, pudo más la mediocridad y la pereza que la lucha y la protesta, me pudo la cama y no la pasión, me pudo el tiempo perdido que las letras perdidas, definitivamente dejé pasar muchas cosas que debieron ser escritas, pero ya no puedo llorar por las letras perdidas.

Siento que en este ejercicio hipócrita de escribir emociones me enredo en la columna principal de la inspiración, no puedo decir que me inspiro en melodías o hechos, no, me inspiro en tragedias y melancolías, prefiero ser protagonista de un melodrama de corin tellado que de una tragedia de Shakespeare, prefiero escribir las urbanidades de la televisión que dramatizar lo rural de la literatura colombiana. En fin, en ocasiones me dedico a escribir lo que se me ocurra y dejo publicar lo primero que salga, para esta ocasión no puedo hacer ello sino más bien editar y censurar todo aquello que me salga de primera mano. Palabras más palabras menos, mi novia me dejó.

Sí, me dejó porque le fallé, me dejó porque dice que cometí el pecado capital, porque le irrespeté y le negué palabras o explicaciones. En estos casos es donde yo discuto el rol femenino de la disputa y dejo entre dicho la capacidad de asombro y escucha que tienen las mujeres, por más señales de tránsito o iluminarías que uno como interlocutor imponga en la conversación, ellas, las mujeres no se hallan en disposición de escuchar todo aquello que uno tiene por decir, sino que prefieren censurarnos y alejarse de nuestro derecho a replica. Pues bien, me uno a los mentados caballeros que como yo han dejado en la expectativa la capacidad de explicar y argumentar lo que para ellas es un error o una falta de respeto y que para nosotros no es más que una mal interpretación de unos hechos o sucesos.

Además de ello, en este abril de lluvias y soles he reducido mi capacidad de ocio al 50% de rendimiento dejando en vela mi potencial espíritu emprendedor y de líder natural que dicen que soy. Me he dejado llevar por el amor al prójimo y he retomado ciertas labores que meses atrás veía extinguirse en mi currículum Vitae, si bien las cosas no están para celebrar, por lo menos puedo festejar ciertos logros profesionales que debía haber celebrado años atrás. Nocturno ha regresado, he logrado canalizar los esfuerzos en esa extraña pero mutable capacidad que tengo de hacer amigos y compañeros de trabajo a cambio de espacios de integración y liderazgo profesional, he balanceado mi cabeza y mi cuerpo con ese pedazo de carne que denominamos cuello y lo he lanzado al frente de mis inoportunas ideas de cambio y progreso.

No reviso mis ocios virtuales desde el mes pasado, sólo hasta este incidente me entrego al acto virtual de reportarle a mis ingratos y olvidados seres virtuales, le doy la vuelta a mi top 10 de blogs y leo lo mismo de siempre, con uno que otro que publica más seguido. Miro mis cuentos y los veo pálidos y vacíos de lectores, las apuestas en fútbol las abandoné por un par de fechas y eso ya me bajó considerablemente en la clasificación general. Leo las noticias de Izquierda y miro en los reportajes de la derecha el equilibrio, busco el equilibrio político de la realidad mundial, me decepciono de los resultados de mi Nacional del alma en el rentado colombiano, miro la copa libertadores y me resigno con los golpes de mi River, en fin. Ha sido un mes largo y mudo pero donde he sentido muchas emociones mezcladas con sensaciones de cambio, ahora inicio la re edición del capítulo 2 de mi libro, de ese texto maldito del cual algún día les daré informes.

Retomaré mis viejas andanzas y trataré de salvar la patria con mi cachetona, pero dudo que ella se halle en disposición de buena escucha y razón, por ahora les brindo una copa de aguardiente y nos seguiremos leyendo por estos lares.

Hasta entonces.

AV